miércoles, 2 de julio de 2014

Y en estas que ...

se alinearon los planetas y el viento sopló a favor, podría ser una buena definición de mi participación en el TP60k.

www.grantrailgtp.com
Se trata de un extraño fenómeno cósmico, que ocurre muy de vez en vez, pero que sin duda cuando sucede, es mágico. Así fue como me sentí en todo momento en carrera, con una sensación distinta, y además viendo que la dirección el viento jugaba a mi favor.


Pongámonos en la previa.

Llegaba a ésta cita con los deberes hechos, con confianza, con buena condición física y con hambre.

El día anterior a la cita decidí ir con unas compañeras de trabajo a un restaurante mexicano...saltándome la cuidada dieta. Eso si! nada de picante y probé una ensalada de nopales con aliño de mango increíble de buena, quesadillas, acompañado de un pastel de chocolate final...Y empezaban los remordimientos de conciencia jeje..

Tras salir del trabajo, ya en casa, me puse a preparar la estrategia a seguir en carrera : cuando descansa, comer, beber, apretar el ritmo, aflojar, donde cambiarme de calcetines, donde motivarme con música etc etc

Y a las 23h aprox a dormir... percibiendo como los astros andaban moviendose en claro síntoma de alineación jeje.

A esto de las 3:15 suena mi despertador, ducha fría para activarnos, desayuno sin saltarnos el guión y carretera y manta hasta Navacerrada. Una vez allí, recogida del dorsal, dejamos la ropa de cambio en el ropero y a coger el bus camino a Miraflores, lugar de salida.

5:30 Ambientazo en la salida. Acaban de salir los titanes del TP80k y tras pasar el control me dispongo en segunda línea de salida, charlando y animando a conocidos. El nivel muy alto, Raul Garcia Castán  Luisete, Luis Pablo Montoya, Pablo Criado, etc etc

Fuente desconocida.

Y primer síntoma de alineación: acuerdo con Silva, corredor del Alarpardo Running de un potencial brutal, salir tranquilos en grupo hasta donde decidamos, pero de primeras a dosificar.

Comienza la carrera.

Pistoletazo de salida y se conforma un grupo cabecero, que tira con fuerza hacia adelante. ``Esa no es mi guerra´´ pienso.

Nosotros a lo nuestro, en un segundo grupo a ritmo cómodo, subiendo por la pista, llegando al curveo continuo. Vamos más lento que mi ritmo en entrenamientos por ese mismo tramo, pero sin duda es el  adecuado.

Cortesía de www.trainerweb.net

Llegamos a un desvío en la subida y comenzamos a través de un sendero más estrecho y técnico. Trato de no perder el trote, y ando cuando no queda más remedio, debido al terreno. Aun así voy fácil y decido ir progresando. El grupo se disgrega y veo unos metros más adelante subiendo con alegría a Mario, un corredor del club La Pedriza de Manzanares, que promete y mucho, por su calidad.




Justo llegando al final de la subida me uno a él, y en 1hora y 2 minutos aprox picamos el primer control en Morcuera. Como plátano, membrillo, tomo un poco de agua y a por la bajada hacia Rascafría. Es aquí donde charlo un poco con Mario, vamos pasando corredores del TP80K, los cuales nos cantan posiciones 11 -12ª de carrera...no me lo creía...
Mario por momentos se lanza, se me escapa, toma ventaja... baja muy bien, con clase.
Me quedo en tierra de nadie, pero con buenas sensaciones bajando..

Y es entonces, cuando me rebasan dos corredores a ritmo vivo, que puedo soportar sin forzar.  A uno de ellos, lo reconozco enseguida, Pablo Criado , un corredor de larga distancia y una calidad brutal. Al otro corredor, lo conoceré después , y es clave, Manuel Perozo, un gran corredor de ultrafondo. Sin duda, otro punto de motivación en carrera, con el que no contaba.
Los tres compartimos el último tramo de bajada y el llaneo posterior hacia Rascafría.

Una vez en Rascafría y pasado el control, un poco de plátano e isotónico.
Es aquí, desde donde comienza la competición de verdad. Sabemos que es un punto clave la subida al puerto Reventón. Es una subida corrible, en condiciones normales, pero que tras 25kms, y apenas descanso, es un verdadero reto.

Los astros continuan alineándose....

Pasado el pueblo y encaminados por el sendero, en la lejanía veo a Pablo, que salió un poco antes del control y no me lo pienso, me uno a él. No hay mayor motivación que compartir kms con corredores de tal nivel. Voy detrás, tratando de aguantarle el ritmo en la zona más dura. Sé que después en la pista podré aguantar mejor. Él trota , yo troto, anda, ando...la clave es no perderle la zancada...

Salimos a la zona más abierta de la subida, y el calor se va notando. Aun así como pensaba, me veo mejor en ésta zona favorable, con fuerzas... incluso para subir un poco el ritmo, lo que hace que me vaya un poco hacia adelante en solitario...Eso sí...no sería más que un puro espejismo...

Tercer avituallamiento, frutos secos, naranja e isotónico para afrontar la última rampa muy dura hasta coronar. Aquí decido no trotar, no forzar e ir andando pese a perder tiempo.
Es tras coronar el Reventón, cuando Pablo me da alcance y tira con fuerza rumbo a Pico Peñalara...Ni hago el intento de seguirle...me vuelvo a repetir que ``Esa no es mi guerra´´.
Sin duda, éste es el tramo de carrera donde más sufro, no me encuentro cómodo con el ritmo... Tomo algo de cafeína y mejoro esas sensaciones. Voy rebasando participantes de las otras dos modalidades y eso me anima y entretiene bastante, al igual que los paisajes a uno y otro lado de la sierra.
Cortesía de @kaikuland
Es en éste tramo, donde soy consciente del único error que cometí en cuanto a mi alimentación en carrera. Y es que voy muy corto de agua, y para más inri afronto, tras beberme el último sorbo en la Laguna de los Pájaros, la subida final a Pico Peñalara sin agua. Tiro por tanto, del bote de cafeína para obtener alguna sensación de lìquido en la boca.

Canchales, rocas y más rocas, y las piernas responden, bien! De respiración ok, y sólo percibo una leve sensación de sed, pero seguimos.

Justo al afrontar Claveles, siento a alguien tras de mí, y veo que es Manuel Perozo. Viene recuperando y sin duda se trata de un poco de viento a mi favor...
Coronamos Pico Peñalara juntos, y ponemos la directa hacia la bajada por Dos Hermanas hacia Cotos.
Durante la bajada, recupero sensaciones , seguro en los apoyos y el ánimo va subiendo.

Todo va mejor de lo previsto, y mejor aún, mi cronometro se me apagó y no me preocupo de tiempos.
Y es así, sin mayores mayores contratiempos como llegamos a Cotos. Cero torceduras, cero caídas, ni atisbo de pájara, músculos ok, ánimo por las nubes...
Cortesía de www.trainerweb.net

Es en el avituallamiento de Cotos, cuando hablo con Manuel y decidimos unirnos en la subida final a Bola del Mundo. Afrontarla juntos fue sin duda un acierto. Hablando con él me doy cuenta del gran corredor que tengo ante mí. Un superclase, ganador del MAM en 2006, y batallador como nadie. Ha participado en Penyagolosa CSP115, GTP110K, Gran Trail del Aneto, etc etc... me siento diminuto a su lado, aunque muy afortunado de acompañarle.

Último tramo de Bola del Mundo, duro, muy duro, a pasos pequeños , pero continuos, sin pausas. Coronamos y toca la bajada final.

Justo antes avituallamiento, agua isotónico y naranjas. Nos comentan que vamos 9º y 10º de carrera.
Al saber lo poco que queda me vengo arriba, estoy exultante. Se trata de una bajada técnica, de dificultad media-baja a través de las tuberías hacia La Barranca. Allá que vamos...

y entonces viene un susto. En plena bajada junto a Manuel, noto un leve tirón en el abductor derecho. Me detengo 5 segundos y lo estiro. Prosigo con cautela. Esto me hace perder un poco con Manuel, que veo como se lanza a tumba abierta, con confianza hacia la bajada por tuberías.
Mientras veo como se me va, voy constatando que el tirón se queda en un susto, y animado, comienzo a bajar con seguridad, sin miedo, convencido de llegar, como nunca antes.

Éste grado de confianza, hace que vaya adelantando a corredores, sin saber si son del TP60, TP80 o el GTP.

Tras otro pequeño susto, un tirón de gemelo sin importancia, llego al último control. Me animan, me dicen que me ven muy entero, que apriete que tengo gente delante a tiro. Me vengo arriba.
Aprieto, sabedor de lo poco que queda. Terreno favorable y en nada, el pueblo de Navacerrada.

Al poco tiempo, veo una figura que me resulta familiar , que pronto doy alcance. Se trata de Luis Alonso Marcos ``Luisete´´, único ganador de todas las pruebas del GTP, 60 , 80 y 110. Me sorprende verlo, ya que hacía unas semanas hablando con él durante un entrenamiento organizado, me comentó que no vendría por su corta preparación. Hablo con él, le doy ánimos y me comenta que va justo de piernas. Le pregunto por el crono y me dice que llevamos 6 horas 29 minutos aprox....No doy crédito!!




 Fotografía de www.racephotos.es/(espero en breve las originales).



Ni en mis mejores presagios pensaba que podía realizar un crono sub 7 horas. La sensación de asombro y alegría da paso a la de determinación.
Tras una última rampa, decido tirar hacia adelante, poniéndo un ritmo alto, fácil, producto de la felicidad , producto sin duda de ver como tras la buena preparación, me ha venido la recompensa.

Me emociono entrando en el pueblo, me acuerdo de otro incansable compañero de fatigas, un compañero perruno, Turco, que nos dejó no hará mucho tiempo y que siempre llevo en el corazón. Siempre me repito por dentro, que nos quedó mucho por vivir y es por ello que estas batallitas siempre se las dedico, siempre me acuerdo de él en mis carreras.

Enfilo la última resta hacia meta, gritando de alegría con un crono final de:
 6 horas 39 minutos y 12 segundos. BRUTAL!! 
  Octavo puesto de la clasificación general.

De momento esto es todo y ya pronto habrá tiempo para reflexiones. Sólo agradecer a la organización del GTP su buen hacer, así como destacar, la calidad humana de sus voluntarios que son la esencia de la prueba.

Ahora toca recuperarse y planificar el segundo semestre del año cargado de motivación.

Hasta la próxima!












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